lunes, 25 de agosto de 2008

LA BELLA Y LA MUERTE




Belleza mortal


Por Eduardo Abusada Franco / Fuente Trome


El novio de la conocida modelo Diana Bajak fue hallado muerto de un balazo en la boca en la cama que compartían en su departamento miraflorino.



José Francisco Forero Crovetto nunca le tuvo miedo a la muerte. Es más, le gustaba coquetear con ella y vivir con la navaja al cuello. Le faltaba aún mucho por disfrutar de la vida, pero hasta los 33 años hizo lo que le vino en gana. Era joven, apuesto, tenía dinero y posición social, pero algo le faltaba. Quiso llenar esa carencia con alcohol y drogas, pero eran solo un paliativo para ese vacío. Tenía a su lado a Diana, una rubia monumental de arrebatadora mirada azul, pero aún algo le faltaba.

El último martes, mientras la eterna bruma miraflorina acariciaba los edificios que se levantan frente al acantilado del Malecón Cisneros, Forero cogió su revólver 'Smith & Wesson', calibre 38, y su lengua entibió tenuemente el cañón de acero. A las 6 de la mañana, sintió por última vez, el rumor de las olas estrellándose contra la Costa Verde. Entonces, un ruido secó hizo trizas el sueño de Diana y los vecinos del edificio 'Maryluz'. Con una bala llenó el vacío que atormentaba su cabeza.


Como perros y gatos


No era la primera vez que la tranquilidad de los residentes del edificio ubicado en la quinta cuadra del Malecón Cisneros, era alterada por la pareja del número 202. Sin embargo, no imaginaron que esta vez el problema se iría dentro de una bolsa negra. Fuimos ahí, en busca de testigos, pero aquellos que llamaban al Serenazgo pidiendo que intervengan en las peleas de los muchachos, prefirieron callar.


"Sé que los vecinos del tercer y segundo piso se quejaban y llamaban a la policía porque paraban peleando", nos contó uno de otro piso. Desde hacía tres meses la modelo Diana Bajak y el administrador Jorge Forero habían hecho, de ese departamento, una fiesta romana constante. Una renta en esta zona exclusiva puede ir de los 800 a mil 300 dólares mensuales, pero Forero, heredero de los negocios inmobiliarios de su familia, no escatimaba en gastos.


"Nunca salían, ninguno trabajaba. Paraban gritando y se tiraban las cosas", recordó el guardián del edificio. En efecto, hace semanas, los jóvenes pedían comida y medicinas a domicilio. En su burbuja frenética se entregaban a la lujuria, el sexo, las drogas, el alcohol y la violencia. "Tuvimos 15 horas de sexo antes de su muerte", dijo la modelo. La policía encontró marihuana, una botella de ron vacía y pastillas de Viagra en el lugar. Acudimos a un especialista para que nos explique las consecuencias de este peligroso cóctel.


'Cocaína produce disfunción eréctil'


"Cuando uno consume habitualmente cocaína, suele tener problemas de disfunción eréctil. Es algo que se produce a nivel cerebral. Al estar sobreestimulado, primero uno puede tener excitación, pero luego hay un bajón y no se puede erectar. Tiene que recurrir al Viagra para poder tener sexo", detalló la doctora María Vivanco.


Sin embargo, Diana niega que ellos hayan llevado una relación violenta. "Me encantaría saber en realidad qué pasó. Me da mucha pena por la familia. Me iba a casar con él y ya teníamos fecha", dijo. Explicó que las marcas que tenía en sus brazos eran manchas de pintura, porque estaban remodelando el departamento. Versión que puede ser correcta, dada la afición de la modelo por el arte.


En su página web escribió: 'me encanta viajar, escuchar música y bailar. También algo de pintura al óleo. Me encanta caminar y estar siempre activa, estoy boxeando un poco y la bicicleta me encanta'.




Ángel o demonio


Pese al escándalo, Diana Bajak Robinson es una reconocida modelo en el medio. "Le hice fotos a inicios de año y era una chica súper alegre. Hace varios meses que no la veía. No era una top model, que en el Perú solo hay 5 ó 6, pero es de cara muy linda y era requerida como anfitriona", narró Hugo, un promotor de eventos al que consultamos.


Por su estatura de 1.72 m no daba la talla para la pasarela, pero por sus perfilados rasgos faciales era calificada en agencias importantes, tal es el caso de 'Arteria azul', como una anfitriona A-1.
"Como toda modelo llegaba un poco tarde, pero nada más. La última vez que la vi fue en Asia Fashion Week junto a Georgette Cárdenas (otra cotizada modelo)", agrega.


Ahondamos más profundamente en el ambiente del modelaje. "Esa chica era una malograda y mechera. Hice eventos a inicios de año dos veces con ella en el Jockey, pero hace meses que no se le veía. Solo sé que tenía un hijo, pero el marido se lo quitó", nos cuenta Carla, una anfitriona que la conoció. Por cada evento, ganaba entre 70 y 80 dólares.


La fama de Diana, en el mundo de la moda, no es de las mejores. Tiene un hijo de 5 años con Víctor, su esposo, al que recurrió cuando Forero se pegó el balazo. En casa del ex marido, una extensa residencia en San Isidro, justo frente a la casa del pintor Fernando de Szyszlo, nos dijeron que hace años que no la veían y la custodia del pequeño la tiene el padre. Sin embargo, ahí fue donde ella se dirigió apenas salió del departamento de Miraflores.


Diana no tenía a quién más recurrir. Sus padres viven separados y cada uno hace su vida con sus respectivas parejas. Pero no siempre fue así. Fue educada en el exclusivo colegio para señoritas 'San Silvestre', en San Isidro. Ya desde muy temprana edad supo sacarle provecho a su belleza y grabó muchos comerciales. Siguió, cuando se casó, viviendo en San Isidro. Es ahí cuando conoció a José Francisco, quien vivía por el barrio. Al principio solo se saludaban, pero con el tiempo empezó a surgir algo más. Él había estudiado administración de empresas y era egresado del colegio 'Santa María', otro exclusivo centro de curas marianistas.


Chico inestable


"Siempre fue un chico inestable, emocionalmente. Necesitaba mucho cariño y vivía solo. A veces, uno no termina de conocer a los amigos. Yo creo que se suicidó", nos confesó Fauto, un compañero de su promoción. A pesar que buscó el cariño en esta indomable rubia, Forero tenía otro amor, su 'Smith & Wesson 38', la misma que mató a 'Pedro Navaja' según la canción. Y no dudaba en usarla.


En julio tuvo un altercado con el polémico Javier Carmona, gerente de Frecuencia Latina. Forero fue con Diana al restaurante 'El hornero', en Chorrillos, donde se sirve parrilla. Al ver pasar caminar a la modelo al compás de sus cimbreantes caderas, susurró: '¡no sabía que acá vendían conchitas!' Conocedor de las artes marciales, Diana lo puso en su sitio y el gerente la llamó '¡prostituta y golfa!'. Ahí, el iracundo novio desenfundó el revólver y se desató una pelea que acabó en la comisaría con la denuncia del caso.


Hasta el momento, solo Diana sabe lo que pasó exactamente en esa habitación. La policía está a la espera de las pruebas de absorción atómica que indicarán, finalmente, quién tiró del gatillo.

lunes, 18 de agosto de 2008

LA GRINGA VALERA



'La Gringa' sentenciado a muerte por cártel mexicano


Por Eduardo Abusada Franco / Fuente Trome


Sueña regresar al Perú porque allá le han puesto precio a su cabeza.

Fernando Valera Calvo, 'La Gringa', fue un tristemente célebre asaltante de residencias en los 70, cuando robó al mismísimo hermano del presidente Juan Velasco Alvarado. En los 80, junto al 'Loco' Perochena volvió a las andadas y asaltó la residencia de 'Vitocho' García Belaunde. Se fugó de Lurigancho y delinquió en USA y México. Hoy, desde una cárcel de ese país, pide ayuda, pues deben mantenerlo con otro nombre, ya que la mafia lo sentenció a muerte por chocar con ella.

Fernando, creí que habías muerto. Hay mucho de qué hablar. Cuéntame de tu vida. Eres chalaco, ¿no?
Nací en 1950, en Surquillo. Pasé la niñez en Barranco y a los 7 años me fui al Callao. Primero, a Santa Marina Sur. Mi padre fue un comerciante, pero quebró en unos negocios y vino la pobreza, por eso nos fuimos a vivir al Callao. Luego nos mudamos al Barrio 5, entre Marco Polo, Guisse y Áncash, a dos cuadras del Callejón de Nariguete, y ahí empiezo en la delincuencia. Era un barrio maleado, se asemejaba a 'Los Barracones'. Allí se difundía lo que era ser un buen bandido, un palomilla, un 'faite'. Entendí eso, pero nunca pensé que llegaría a ser el delincuente que me convertí. Tenía una vida fugaz. Recién a los 17 fui consciente de eso y decidí seguir, pero con un modo de vida más asolapado para poderle sacarle provecho al delito.

¿Quién te puso de chapa 'La Gringa'?
Mi apelativo de familia siempre fue 'El Gringo', porque soy castaño claro y era el más blanco de la casa. En esa época el apodo se transformó, porque algún personaje me odiaba.

Te hiciste famoso por asaltar lujosas residencias, ¿cómo las escogías?
Al salir de la Correccional de Menores de Maranguita, me dediqué a la 'monra'. Iba elevando los niveles de casa. De chalet, a chalet residencial y de este a residencias; y luego a mansiones. Operábamos por San Isidro, Orrantia, Miraflores.

Tan buenos tampoco eran. Caíste en 'El Frontón'.
En diciembre del 69 me invitaron a hacer un robo. No tenía necesidad de hacerlo, pero lo hice como favor. Pero ya teníamos el dedo puesto. Hicimos el contacto en el barrio y ahí estaban los soplones. Nos fuimos a encontrar a Colón y Guisse, pero ya la policía nos estaba esperando. En 'El Frontón' conocí a muchos, como el gringo Portugal (de la 'Banda de la Metralleta', sobre su vida se hizo la película 'Alias La Gringa'), que estaban en su apogeo. De las historias de ellos uno se inspiraba y salí, a los dos años, con ganas de formar mi propia banda.

Te volviste especialista en abrir cajas fuertes, ¿cómo hacías?
Todas las mansiones tenían caja fuerte. Había que descubrir dónde estaban, uno lo hacía por instinto. Al principio nos íbamos frustrados, porque de la caja no podíamos llevarnos nada y se me ocurrió la idea de romperla. Compré dos cinceles 'Stainless steel' y una comba de dos kilos. En la práctica fui perfeccionándolo y ya casi no usaba la comba, solo con el desarmador y cincel. Nos pusieron 'La banda de los cien millones', porque hasta ahí llegó el monto de lo robado. Serían unos dos millones y medio de dólares.

¿Es cierto que se metieron a la casa del hermano del presidente Velasco Alvarado?
También a la del ministro de Relaciones Exteriores, Miguel Ángel de la Flor. No sabíamos. La de Velasco quedaba frente a la Clínica Javier Prado, en una esquina. Estaba custodiada por policías, pero hubo un descuido de ellos. Ingresamos, pero no tuvimos acceso a los dormitorios donde estaba la caja. Nos quedamos pensativos porque la puerta tenía alarma, pero no sonó. Luego, en el hall de la entrada, estaba la foto del presidente, lo que me extrañó mucho. El decorado era antiguo, y la sala era tan grande que no encontraba la caja. El tiempo corrió, nos aburrimos y tuvimos que irnos. Solo nos llevamos un par de pistolas. Como era el hermano del presidente, se hizo un escándalo mayor. Velasco puso el grito en el cielo y dio la orden de chaparnos vivos o muertos. En tres meses nos agarraron.

Fue así como te hiciste compañero de correrías del 'Loco' Perochena, ¿no?
A él lo conocí en el 74, en 'El Frontón'. Fue un corto tiempo, pero me hice su amigo cuando cayó en 'El Sexto'. Ahí planificamos varias acciones para 'trabajar' afuera. Cuando me escapé, fue con 'Cuchi Cuchi', quien era del barrio de Perochena, y con ellos formamos la banda junto a 'Pilatos' (dirigió el motín de 'El Sexto' en 1984, donde murió). Fue denominada 'La banda de los malditos'.

Pero, entonces, ¿cómo saliste del Perú?
Caí en Lurigancho como un delincuente de alta peligrosidad. Pudimos meter armas al penal, granadas, pero las fugas se fueron frustrando. Pero en el 85 hubo un motín, se volvió una mazamorra el penal, y aproveché brincando la malla con el 'Parihuela'. Hice contactos, fui a Pucallpa. Crucé la selva, navegué en el río Amazonas hasta Taguatinga (Brasil). De ahí llegué a Río de Janeiro y con pasaporte falso pedí visa a México. Luego pasé a Estados Unidos. Pero a uno no se le quita la maña y volví a caer preso. Me junté con unos chicanos en Houston y me metieron preso en Texas. Me cambié de nombre a Antonio Cortés Robles, haciéndome pasar como mexicano.

Pero tú estás preso en México.
Es que salí con libertad bajo palabra a los 4 años, pero me hicieron un contrato de muerte. O sea, que un enemigo me mandó a matar y aún sigue el contrato sobre mí. Muchas veces peleé con gringos, negros, chicanos que querían asesinarme. Sabía cuando me querían hacer la trampa y la desbarataba. Le pagaron a una mafia muy grande de los gringos para que me mate en prisión. Afuera también me persiguen para liquidarme, pero les era más difícil porque no me importaba la muerte. Entraba y salía de Texas a México haciendo acciones, hasta que me salió mal un secuestro y me refugié en la frontera. Me puse a asaltar y caí preso en el pueblo de Reynoso. Ya vengo pisando cuatro cárceles acá en Taumalipa (Estado de México).

Has matado gente y estás pagando, no sé qué reclamas.
Es que yo tengo un proceso de identificación. Los federales me encarcelaron con otra identidad. Interpol les dio mis datos, pero ellos no hicieron caso. Acá, en México, aún sigue el precio sobre mi cabeza y mis enemigos han desaparecido mi identidad que certifica Interpol y me quieren dejar como americano. Yo pagué con cárcel ya. En Lima han borrado todo rastro de mí, no existo.
Pero acá seguramente también irás a prisión.
Quiero ir a mi país. Acá estoy muerto. Los problemas que tengo allá ya prescribieron con todos los años que estoy fuera del país.

lunes, 4 de agosto de 2008

BUSCO NOVIA


Por: Eduardo Abusada Franco /Fuente Trome
JOVEN BUSCA NOVIA


Renato Cisneros es un talentoso periodista y poeta, y uno de los solteros más codiciados. Su libro 'Busco novia' se ha convertido en un fenómeno editorial y a diario le llegan centenares de mensajes de chicas para 'citas a ciegas'.

Renato, eres joven, pero ya tienes una edad en que tus amigos se están casando. ¿Cómo te sientes cuando te llegan los partes matrimoniales y tú aún nada?
Se trata de los mismos amigos con los que creciste y todos lograron las mismas cosas al mismo tiempo. Más o menos, como salir del colegio, entrar a la universidad, sacar brevete, 'tirar' por primera vez, el primer beso, la primera borrachera... Son como etapas que se van quemando en paralelo y, de pronto, llega el momento de los 30 en que la mayoría comienza a encarrilarse en el tema matrimonial. Yo tengo 32. Entonces, uno dice: ¿en qué momento ellos pegaron el salto y yo no? Te sientes un poco cuestionado. Cuando me llega un parte, me siento absolutamente viejo.

¿Qué dicen tus padres?
Mi papá murió hace 13 años. Vivo con mi mama y mis hermanos. Soy el mayor de los hijos hombres. Las madres son todo un personaje. La mía es muy tradicional. Pero las mamás tienen un doble discurso extraordinario: por un lado, fomentan la idea de que te cases, de que formes una familia, pero apenas llevas una chica a la casa, empiezan a hacerle un identikit y siempre la critican.

Así son las suegras pues, salvo que sea hija de una de sus amigas.
(ríe) Claro. creo que es preferible que tu chica y tu mamá se lleven mal, a que se lleven bien, lo que sería más peligroso. Si se llevan demasiado bien, existe la posibilidad del 'corralito', la complicidad entre ellas, la sensación de espionaje entre dos mujeres que están a tu alrededor. Pero si se llevan mal, no importa. Mejor que se lleven de manera neutral.

¿Y con tus suegras de turno, cómo te ha ido?
Me ha ido bien. Siempre he empatado con las mamás de mis ex enamoradas, y con los papás también. En ese sentido, me han tocado familias bacanes. Y eso es una vaina porque a la larga, cuando tú terminas, lo haces con ellos también. Es muy patético eso de que termines con tu enamorada y vas a visitar a sus padres. ¡No tiene ningún sentido! Porque, en realidad, uno va a visitar a la ex novia y chequea si en el cuarto de la ex todavía está tu foto por ahí.

¿Tú eres el que cortas la relación o te dejan?
Siempre han terminado conmigo. Solo una vez lo hice con una chica, pero en general mi experiencia siempre ha sido la del abandonado, más que el que se va y tira un portazo. Pero para que no suene a víctima, debo decir que siempre he merecido que me dejen, siempre he hecho algo malo.

Tal vez pides 'la prueba del amor' muy rápido.
El otro día, una chica me escribió en el blog: 'Tienes razón, las chicas estamos hartas de que nos pidan ir a la cama a la segunda cita'. Le respondí: 'Estoy de acuerdo, por eso siempre se lo pido a la primera'.

¿Tú piensas mal de una chica que se va a la cama contigo en la primera cita?
Sí. No es que piense necesariamente mal, pero me tomaría con cuidado el hecho de creer que pueda llegar a ser mi enamorada. En verdad, es una cosa muy machista. Lo que voy a decir puede ser como meterme un balazo en los pies, pero yo me enamoro de las chicas que no me hacen caso.

Se dice que 'de la muerte y de los cachos nadie se salva', ¿qué crees?
Es cierto. Pero la mujer tiene la ventaja de que es mucho más confidencial, tiene una habilidad increíble para manejarse en el secreto. Nunca fanfarronea, no lo cuenta. El hombre, en cambio, se va de boca. Cuenta con cuántas chicas está saliendo.

¿Te has enterado, alguna vez, si tu novia te ha sacado la vuelta?
Sí, y es horrible. Es una sensación entre pánico, claustrofobia y rabia. Un hombre celoso es peligrosísimo.

Si se entera la pareja que uno ha sacado los pies del plato, ¿piensas que la relación se puede volver a entablar?
La gente lo hace, cree perdonar infidelidades, pero no vuelve a ser lo mismo. Es una cosa que se ha roto y, como dice la salsa, 'es mejor buscarse otro amor'.

En tu blog y ahora libro, hablas de tus relaciones sentimentales, pero ¿a qué edad fue tu primera vez?
A los 18 años, me parece. Fue un 'choque y fuga' absolutamente olvidable. Además me demoré tres minutos, creo, así que fue olvidable para ella (ríe).

No te preocupes, creo que es el promedio.
Por eso las películas pornográficas, en el fondo, son una crueldad. Los galanes del porno duran horas de horas y uno se siente en desventaja total.

¿Crees en el matrimonio?
Pienso que ya se acepta que el matrimonio no es la única forma de realización sentimental. Mucha gente de mi generación fue educada con este esquema de vida, de que casarse era lograr la meta afectiva. Pero ahora la gente se plantea la convivencia e, incluso, una vida en solitario.

Pero aún se dice 'solterón maduro, maricón seguro', ¿te sientes aludido?
(sonríe) A las que más le aterra eso es a las amigas de mi mamá, a mis tías, que siempre me preguntan 'y tú para cuándo, hijito', cada vez que voy a un matrimonio. No sabría decirte si me voy a casar o no, porque cuando lo decida estaré enamorado y cuando lo estás, pierdes toda lucidez. Casarte o no casarte, ya no es la gran duda. Sí es una soledad que tú escoges, puedes ser perfectamente feliz.

¿Qué es lo primero que le ves a una mujer?
Yo me río mucho cuando los artistas siempre contestan 'las manos, los ojos'. ¡Mentira! Lo primero que le ves es el 'tarro', las tetas. Es lo primero que ves, no lo primero que conoces.

¿Y por qué no encuentras novia, qué está fallando?
Cada vez me cuesta más comprometerme y las mujeres si identifican que tú no quieres eso, se van alejando. Si sales un tiempo con una chica, ya te empiezan a pedir un cierto título. Te preguntan 'oye, qué somos. Cómo qué te presento, definamos esto'.

¿Crees, como dice la balada, que 'el amor acaba'?
Hubo un estudio en Inglaterra y otro en México, hace dos años, que coincidían en que el amor dura cuatro años. La respuesta era en que había todo un rollo químico en el cuerpo. Que la pasión dura 3 ó 4 años máximo. Lo que viene después es el amor transformado en complicidad, compañía o fatalidad, rutina, costumbre.

Supongo que con lo famoso que se ha hecho tu libro, las chicas se te mandan a cada rato.
Bueno, sí. Me dicen 'hay que salir, hay que tomar una chela, quiero conocerte, yo puedo salvarte de tu soledad'. Pero yo le tengo un terror a las citas a ciegas. Te obligan a actuar de una manera determinada, a ser inteligente, ser chistoso. Tienes que improvisar un personaje que no necesariamente eres tú.

¿Y qué te parecen los amores por Internet?
No creo en los amores por Internet ni en los amores distanciados por la geografía. Finalmente, terminas enamorándote de algo que no es la persona, de cosas poco físicas. Es una persona a quien no puedes tocar, oler, mirar a los ojos y saber si te está mintiendo o no. El amor por Internet es una manera de sentirse menos solo.

¿Con cuántas mujeres te habrás acostado?
No me arriesgaría a darte un número, pero estimo unas 20. No es mucho creo, ahora que me pongo a pensar. Mejor ponle menos de 40, ja, ja, ja.