martes, 16 de septiembre de 2008

EL REY DE LOS TABLOIDES


Por Eduardo Abusada Franco / Foto Ernesto Quilcate / Fuente Trome

Guillermo Thorndike es un notable escritor oculto tras su inmensa aureola de gran periodista. A los 20 años se inició en el mítico diario 'La Prensa' y fue discípulo de esa leyenda llamada Raúl Villarán, fundador de 'Ultima Hora' y 'Correo'. Don Guillermo dirigió periódicos que hicieron historia en los 70, 80 y 90, siendo el último el recordado 'Página Libre'.
El padre del reportero Augusto Thorndike acaba de publicar el libro 'El Rey de los Tabloides', la biografía de su maestro Raúl Villarán y un repaso de las vicisitudes del periodismo, su más grande adicción.


Don Guillermo, ¿quién es el verdadero 'Rey de los Tabloides', Raúl Villarán o Guillermo Thorndike?
Es Raúl Villarán. Lo que pasa es que murió joven, a los 49 años, en un mal momento. Había, oficialmente, un olvido de la gente de antes. Es la época en que los periódicos están confiscados, la prensa era prisionera. Pero Villarán era una persona que estaba en contra y, oficialmente, proscrito. La enfermedad había sido muy dura con él. Dejemos esa parte de los periódicos, que es abrir heridas que no han terminado de cicatrizar, pero hablando de Villarán en concreto, yo estuve con él en Costa Rica, donde se fue a vivir a la casa de Genaro Delgado Parker, que era su gran amigo. Genaro lo llevaba hasta la puerta de su casa, porque le tenía miedo a un perrito del vecino. Ahí ya estaba en proceso de desintegración física por la diabetes.

Usted también marcó época. Creo que comenzó muy jovencito en 'La Prensa'...
Empecé a los 19 años en 'La Prensa', pero a los 14 ó 15 ya ayudaba en 'Caretas'. En verano, cuando era dirigida por Paco Igartua y Doris Gibson.

Entonces, ¿tuvo claro desde niño que iba a ser periodista?
Me gustaba mucho, pero no creía que sería periodista. Qería ser médico. Entré a estudiar Letras en San Marcos y, luego, postulé a medicina en una facultad muy estricta en Estados Unidos. Me di cuenta de que no era lo mío. Pensé en los 10 años de estudios que tendría que estar lejos de mi país, de mi gente. No era que me asustara la sangre, la muerte, pues era muy acorazado frente a eso. Como periodista he estado en sitios, donde se han caído aviones, y no se me agrietaba el ánimo.

Casualmente usted empieza cubriendo policiales...
Claro, yo era reportero policial. Una vez con Armando Robles Godoy, cuando aún no se había dedicado al cine, y él era primerizo y estaba de turno, nos avisaron que hubo un crimen en el Hotel Paruro, que era de chinos. Fue un crimen pasional y me dijeron que vaya con Armando. Él iba adelante, subiendo las escaleras y, de pronto, veo que empieza a pararse y se dio con el cadáver que tenía un cuchillo enorme clavado en el estómago. Era un lago de sangre, que iba cayendo por los primeros peldaños. Armando no llegó arriba, tuvimos que bajarlo (ríe). Afecta.

Dirigió varios diarios, ¿cuál le satisfizo más?
De los que yo he hecho, creo que 'La República'. Fue el que más vinculación tuvo con el público. Mira, 'La República' salió como periódico del mediodía y empezó a levantar al cabo de tres meses a 180 mil ejemplares, algo nunca visto en la historia del periodismo. Provocó el cierre de 'Última Hora', de 'El País', terminó de aniquilar a la pobre 'Prensa'. A mí me daba miedo, porque estábamos eliminando los diarios de donde yo venía y mi corazón estaba triste.

Los periodistas están inmersos de manera irremediable en la bohemia, ¿cómo era la de su tiempo?
Nosotros salíamos a las 3 de la mañana. A esa hora solamente hay 'mujeres malas', como decía Villarán. Las niñas bien, ya todas estaban en casa durmiendo. Había una serie de nightclubs. Salíamos a tiempo para lo que se llamaba 'el segundo show', que acababa a las 4:30 de la mañana. El show era el mismo que el primero, pero el público cambiaba. Con Guido Monteverde, Lucho Banchero y Villarán íbamos al 'Copacabana'. Era muy divertido, porque quedaba a la vuelta del Congreso, y de plano te encontrabas con algún senador medio escondido. Pero había un cierto juego limpio en esa época, no había ampays.

¿Se puede ser periodista y abstemio?
Hay casos. El hermano de César Lévano, el pilar de la 'France Press' en Lima, era evangelista y nunca tomó alcohol. Su hija fue jefa de informaciones en 'La República' y nunca tomaba licor. Además eran abstemios convencidos, combativos y lo promovían. Recuerdo que el ingeniero La Rosa de 'La Prensa', y los más bohemios de 'El Comercio', caían en la madrugada en 'La Taberneta' en el jirón Puno. Llegaba con su libro bajo el brazo y leían en inglés, y solamente los vi comer ravioles toda la vida.

El que no era muy abstemio fue Chirinos Soto.
En la parte final de su vida empinaba harto el codo, pero muy talentoso.

¿Cree que el periodista se estudia o se hace en la 'cancha'?
No sé cómo estén organizados los estudios de periodismo, pero sí creo que los periodistas deben tener una base cultural fuerte. Si no tienes una cultura básica, de qué puedes hablar. A mí me sorprende, a veces, cómo hacen las preguntas. Te das cuenta que el entrevistador no tiene idea de cómo es el trámite o la organización del Congreso o de la República. Tienes que saber cómo funciona tu país.

En la época del fujimorismo los medios se corrompieron mucho, y el 'gordo' Bresani pagaba titulares, ¿se ha institucionalizado la 'mermelada'?
Cómo decírtelo. Bresani era un tunante muy simpático. Lo conocí hace 30 años. Decía de repente que había comprado un restaurante y actuaba como si fuese el dueño y te invitaba. Daba la sensación de ser un hombre que tenía varias revistas, y de ser un intermediario entre capitales oscuros. A mí me caía muy bien, pero sé que era capaz de todo. Pero era más bocón que otra cosa, era el que llevaba los sobres y conociéndolo al 'gordo', seguramente también se los pelaba. Pero no sé cómo funcionaba la mermelada, no la vi donde estaba yo en esa época. Me da pavor viendo a los dueños de canales recibiendo un dinero en bolsas, que ni siquiera necesitaban. Yo no imagino a los dueños de mi época recibiendo dinero de Esparza Zañartu en bolsas de papel, nooo.

Ha escrito varios libros y su pluma es muy reconocida, ¿ha heredado su hijo Augusto este don o se lo ha enseñado usted mismo?
Yo no le he enseñado a escribir a mi hijo Augusto, fue Cristian Vallejo, ese espléndido cronista que trabajaba conmigo en 'La República'. Ahí Augusto, creo, estuvo un año trabajando de reportero, y su profesor, que se preocupaba por él y lo tomó a su cargo, lo corregía, era Vallejo. También lo ayudaron otros como el propio Sakuda (fue también director de 'La República')

¿Qué le puede recomendar a los periodistas 'calichines'?
Hay un verso de Rimbaud, que me ha acompañado a la largo de mi vida de 'Una temporada en el infierno'. Dice: 'desconfía de la comodidad'. Creo que para el cumplimiento cabal de comunicador, primero debes aceptar que hay gente que sabe más que tú, pero no siempre, en algo tú sabrás más que ellos. En segundo lugar, debes desconfiar de la comodidad, que es el dinero fácil, la vida más confortable, el halago más propicio, más suntuoso. Hay que desconfiar de eso. A veces cuando llega la comodidad, es porque te están torciendo lo que debe ser el rumbo de la vida.

6 comentarios:

Anónimo dijo...

El más vil de los periodistas. Qúé paso Ocicón..se te encogieron las boloñas?

Eduardo Abusada dijo...

Mi estimado anónimo, ya quisiéramos tener la quinta parte de talento periodístico que tiene G.T.

Admiro la inteligencia, donde quiera que esta se encuentre.

Anónimo dijo...

No hay inteligencias puras, el gordo tiene su pasado gris y debiste preguntarle, salvo que no lo supieras por ser calichin Por que trabajo con los Winters e inventaba eso del monstruo de los cerros todos los dias en 90 segundos durante la epoca mas perversa de la prensa peruana? Como fue eso de Paginas libres, un semanario vitriolico??

Eduardo Abusada dijo...

Sr. anómimo. De todo eso se habló en la entrevista. Cuando tenga tiempo colgaré el resto. Claro que sé esas historias que Ud. refiere, y de primera mano, de personas que trabajaron al lado de G.T. en Página Libre y en el 2 de los Winter.

Anónimo dijo...

me gusto el post, es una b4ena entrevista.
no conozco eso si, lo que menciona el anonimo.
Lo que si creo es que deberia de darse a conocer, pues al parece sabe lo suficiente como para sostener un debate desde fuera del anonimato.

keep going.

m.

Carlos dijo...

Veo que nunca puso lo que decía que conversó con G.T. sobre su favor a la corrupción fujimontesinista, uno de los periodistas más corruptos del Perú. Una entrevista de lo más soporífera.

Carlos